lunes, 30 de marzo de 2009

martes, 24 de marzo de 2009

Minitas de oro


Estamos en crisis. Casi no hay día que no lo oigamos. Pero ¿Donde están las minitas de oro que pueden sacarnos del hoyo? Pienso que uno de los grandes negocios por explotar es el turismo. México sigue siendo muy atractivo a pesar de la violencia (como lo son Egipto, Turquía, Tierra Santa, la India o Guatemala ¿o no se les antoja ir?).
Pero en México, la gran bronca es que nos creemos muy acogedores, tan pagados de nosotros mismos somos, que pensamos que una sonrisita borra los malos tratos de una inadecuada señalización, de un abusivo cobro (por mas que paguen en euros o dólares), de una insuficiente higiene, o un pésimo transporte público. Porque usted lector, lectora, si ha sido turista, sabe que todo eso es muy importante cuando viaja a un país donde no habla la lengua nativa y desconoce del todo las costumbres ¿o no? Me va a perdonar, pero hasta el espíritu de aventura tiene un límite.

Una minita por explotar esta en la central Camionera del Norte. Ahí, en un minúsculo mostrador, hay unas mal encaradas dependientas (que por supuesto no mascan una palabra en otra cosa que no sea el español y a medias) y que atienden a los valientes turistas que no contrataron un paquete-todo-pagado y quieren ir a Teotihuacán. Es el mostrador de los Autobuses teotihuacanos que van a la zona arqueológica y a sus alrededores (hasta Chignahuapan, Pue. de hecho). Y los valientes que son montón, reciben un boleto sin hora de partida e ilegible, los autobuses salen con un horario aleatorio (más o menos cuando se llena), las unidades no se han limpiado en los últimos veinte años y tampoco han recibido mantenimiento (hay evidencias de anteriores pasajeros mareados, vidrios rotos pero reforzados con micas adheribles en tono verde-turbio, cercos de cigarro en los asientos y cuenta con más asientos de los que debe llevar la unidá). Por si todo esto fuera poco, el conductor, mal arranca, empieza a subir pasajeros, vendedores y cantadores en cada esquina. Los pasajeros nuevos no cuentan con lugar, pero eso es lo de menos: ya pagaron su pasaje. Los larguiruchos güeros se hacen ovillo en su asiento. Las múltiples paradas multiplican la posibilidad de que entre paletero y cantor, se suba un asaltante, pero supongo que eso también es lo de menos. Tras infinitas paradas, es posible llegar a Teotihuacán, molidos de tanto enfrenón, calor y ruido. ¿Exagero? Ni tantito.

Los Autobuses teotihuacanos cobran relativamente poco (menos de tres euros al cambio) pero no hay competencia, nadie más en la central camionera ofrece el servicio. Pienso que los turistas (pudiendo elegir) pagarían el doble o triple por un servicio sin tantos inconvenientes.

¿Es posible que nadie caiga en cuenta de estas deficiencias? ¿Es posible que nadie repare en que de corregirse estos “detallitos” tendríamos mayores ingresos y no una bola de “invitados a no volver” tal como sucede ahora?

lunes, 23 de marzo de 2009

PRImero el mal gusto

¿Qué les hace pensar a los Partidos políticos que la imagen o la voz de niños en su publicidad, les va lavar la cara? Detesto la voz de la niña gangocilla, falsamente conmovida que en el anuncio del PRI dice: Y tu mexiquense ¿a qué te comprometes?

El adjetivo gentilicio es horrible, la pregunta es tonta ¡Cómo si fueran los ciudadanos los que deben comprometerse a… ¿Qué?! Si son odiables, de veras.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Bolardos



¿Qué pasaría si se instalan en México? El que colgó el vídeo lo encuentra muy (cruelmente) divertido, yo lo encuentro muy interesante. ¿Dónde es?

viernes, 6 de marzo de 2009

De coches y cosas peores


Por qué nadie, jamás, nunca, pensó en poner estacionamientos de autos en las bocas de metro de la ciudad de México. Me lo he preguntado muchas veces atrapada en un auto sobre calzada de Tlalpan, viendo correr el metro: “¿dónde puedo dejar el coche (seguro) y subirme al metro?” La única opción que he encontrado es el estacionamiento del Wal Mart de Nativitas, comprando unas cositas y pagando el importe del estacionamiento (mi reconocimiento a ese Walmart: tiene una entrada peatonal elevada desde la puerta del metro, que evita pasear toreando coches y carritos de super, como es habitual en los supermercados).

Pero resulta que quizá no todos los arquitectos y funcionarios que intervinieron en la construcción del Metro ignoraron esa posibilidad. En la salida del Metro Universidad, existe un generoso estacionamiento sobre la avenida Antonio Delfín Madrigal, del lado opuesto a Ciudad universitaria, colindante al metro y al paradero de peseros (ver foto). ¡Sí, existe! Pero nuestras autoridades locales con la miopía que les caracteriza utilizan ese espacio (desde hace sexenios) como corralón de taxis piratas, lo que equivale, según una nota del periódico Reforma de ayer, a un cementerio automotriz completamente saturado.

Bien a bien no sé qué utilidad tenga un corralón así, seguro que la mordida es tan onerosa, que los taxistas prefieren perder su unidá, antes que pagarla. Mientras tanto, todos perdemos. El GDF no gana nada por esa bola de chatarra y los posibles conductores que dejarían su vehículo pagando una módica cuota, siguen atrapados en algún embudo vial.

lunes, 2 de marzo de 2009

Trueque de palabras


Si bien no hay muchas palabras de origen náhuatl que se usen en el español de otras regiones, existen algunas palabras que por misteriosas razones mudaron de domicilio y se intercambiaron por otras.
Gis es una palabra en uso solo en Latinoamérica según wikipedia y según la Real Academia, viene de la palabra latina gypsum, yeso. Mientras que la tiza, que es la palabra que define al mismo objeto, se usa solo en España ¡y viene del náhuatl!
tiza.
(Del nahua tizatl).
1. f. Arcilla terrosa blanca que se usa para escribir en los encerados y, pulverizada, para limpiar metales.

Sin embargo, todo parece indicar que tanto la tiza como el gis serán muy pronto algo parecido a un objeto arqueológico.
Atizapan de Zaragoza, Tizatlán, Tlax. y Tizapan, Jal. son lugares donde la abundancia de tiza dio nombre a la población.
Agradezco la información al autor de este blog tan políticamente incorrecto.